Durante mucho tiempo os hemos enseñado cómo descargar programas y cómo usarlos y aprovechar todas sus posibilidades. Pero de lo que no os hemos hablado es de cómo hacer programas. No voy a mentiros: puede ser una disciplina bastante dura y hay carreras en las que se introduce a ella, pero sí que podéis empezar a aprender. Y pocas cosas hay más gratificantes que hacer que vuestro ordenador haga exactamente lo que queréis que haga.

A programar se ha dicho

Programar no es fácil. Pensad que hay ciclos formativos de grado medio y de grado superior, y grados universitarios, dedicados íntegramente a aprender a desarrollar aplicaciones, incluso aplicaciones de tipos muy específicos. Es más, desde aquí quiero eliminar un mito: las matemáticas sí que valen para algo, sobre todo a la hora de programar. Y si vais a intentar programar videojuegos ni os cuento.

Si no sabéis programar y no queréis o podéis matricularos en estudios especializados, sí que puedo recomendaros una alternativa más barata: los cursos masivos online, que suelen ser totalmente gratuito y que únicamente requieren de una conexión a Internet (de la cual ya disponéis, dado que si no fuera así no podríais estar leyendo este texto). Por ejemplo:

• Programación para todos (Python), en Coursera.
• Introducción a la programación interactiva en Python, en Coursera.
• Introduction to Java Programming, parte 1 y parte 2, en edX.
• Programming with C#, en edX.
• Introduction to Computer Science, en edX.

Estos cursos, eso sí, son en inglés. En español puedo recomendaros algunos, en MiríadaX.

• Introducción al desarrollo web (iDESWEB).
• Desarrollo de aplicaciones en HTML5 y para dispositivos Firefox OS.
• Introducción al Desarrollo de Aplicaciones Móviles con Windows Phone.

No penséis que vais a ser programadores de un día para otro: necesitáis constancia, paciencia y ganas de aprender. Y algunas herramientas para vuestro ordenador, eso sí. Depende de la tecnología. Por ejemplo, si vais a programar C#, Sharp Develop o, mejor, Visual Studio. Microsoft ofrece sus herramientas de manera gratuita para que todos puedan desarrollar usando sus tecnologías.

Para otros lenguajes basta con usar un editor de texto plano como Sublime Text o Notepad++, y algún compilador instalado, por ejemplo, vía Cygwin+MinGW. Depende de lo que querrais hacer, vaya.

Generando aplicaciones

No obstante os puedo proponer una segunda opción, por si queréis hacer aplicaciones rápidamente. Si son muy específicas dentro de la genericidad (por ejemplo, aplicaciones para gestionar datos, o para mostrar alguna información en tu móvil) seguro que encontráis generadores de aplicaciones.

Algunos ejemplos son NeoBook o Velneo vDevelop, aplicaciones que sirven, básicamente, para generar aplicaciones de manera visual y transformarlas en ejecutables listos para funcionar. Otra posible opción es utilizar el App Studio de Windows, aunque tiene un pequeño problema: estas aplicaciones únicamente funcionarán en Windows Phone. AppsGeyser es una aplicación web similar, así como App.Yet o AppsBuilder.

Podéis simplemente probar a ver si se ajustan a lo que queréis hacer.

Imagen | Michael Himbeault